SPFS (Síndrome Post-Fin de Semana)

Después del mundialmente conocido como Síndrome de la Lesbiana Caracol (SLC) llega el estudio de un nuevo síndrome.

Este estudio es totalmente empírico basado en reiteradas experiencias propias transcurridas durante varios meses.

Es posible que alguien alguna vez se haya visto afectado por este síndrome sin saber qué era, así que por eso voy a exponer las causas, que quizás puedan variar según los casos, y seguidamente los efectos que creo que pueden ser más comunes a todos los posibles casos.

Espero que este estudio sirva para reconocer posibles casos futuros.

El Síndrome Post-Fin de Semana o vulgarmente conocido como SPFS, se da cuando a la persona que te encanta, que te alegra la vida, que te hace tener una sonrisa permanente en la cara sin saber muy bien por qué, sólo la puedes ver de lunes a viernes. La primera consecuencia de esto y, posiblemente, el efecto más difícil de entender, es que, por muy raro que parezca y por muy bien que te lo puedas pasar, no quieres los fines de semana ni en pintura y cambiarías los dos días del fin de semana por dos lunes sin pensarlo ni una pizquita.

Los efectos de este síndrome empiezan a aparecer en el transcurso de ese fin de semana en forma de “echar de menos infinitamente a esa persona” porque, sin saber muy bien por qué, necesitas que esté cerca de tí, pero como su propio nombre indica, los efectos más fuertes se manifiestan pasado el fin de semana, es decir, el lunes.

El lunes llegas al trabajo y por fin vuelves a ver a esa persona tan, tan especial que te hace estar feliz, que te hace sentir que estás queriendo y sentir que te quiere de la misma forma que quieres tú. Como ya he comentado anteriormente, la has echado infinitamente de menos y has estado pensando en ella cada minuto del fin de semana. El síndrome hace que el lunes necesites que esa persona te diga cuánto te quiere y que te ha echado de menos infinito+1 por lo menos. Este síndrome también hace que estés más blandita de lo normal y que quieras que esa persona también lo esté y que te diga cosas bonitas continuamente.

Este síndrome tiene dos variantes importantes con efectos aún más demoledores. Estas variantes son el Síndrome Post-Puente (SPP) y el Síndrome Post-Vacacional (SPV), cuyas causas y consecuencias o efectos no son los mismos que los de los síndromes universalmente conocidos por el mismo nombre.
La explicación de estos síndromes variantes del SPFS es muy obvia y muy sencilla, cuantos más días seguidos estés sin ver a esa persona, el “echarla de menos” aumenta de forma exponencial y esto tiene consecuencias catastróficas cuyos efectos hacen aparición y pueden verse claramente el día después del puente o de las vacaciones, respectivamente. Por muy increíble que pueda parecer, al igual que ocurre en el SPFS, en el SPP y en el SPV piensas en quién fue el gracioso o graciosa que puso ahí ese puente y esas vacaciones que tú no has pedido ni quieres tener y que cambias por días laborables con los ojos cerrados.