Es entonces.....

Hay momentos impagables.

Cuando te sacan de tu ciudad por motivos de trabajo durante un par de días.

Cuando lo que te gustaría sería quedarte metidita en tu oficina de siempre en frente de tu pantalla de ordenador con tu teclado.

Cuando además vas a estar constantemente acompañada por una no mala compañía, pero no la que más te gustaría.

Cuando ya hace muchos años que estás acostumbrada a tener muchos momentos a solas.

Cuando la mayoría de las veces disfrutas de ese tiempo a solas y cuando no lo haces eres tú quien elige con quién compartirlo.

Cuando la mayoría del tiempo tu mente sólo piensa y sólo quiere pensar en alguien que se quedó en aquella oficina.

Es entonces cuando más echo de menos esos momentos de estar sola conmigo misma y, es entonces también cuando tres horitas por fin a solas mientras como, con un café descafeinado de máquina solo con hielo, un cigarrito y mis pensamientos ahora felices, son el mejor momento, para mí impagable, en dos días.